Preparando el viaje...

Lo más difícil llegó hace ahora un mes, me quedé sin trabajo, y ello implica tener el tiempo que siempre me faltó. Casualmente Héctor, uno de mis compañeros de piso y amigo (es por si lo lee...) tampoco tenía ocupación laboral y estaba rumiando un proyecto, un viaje a Chile.

Yo llevo años queriendo hacer un viaje de verdad, uno de esos en los que "se conocen movidas", y sitios, y gentes, y maneras de vivir, y que cuando vuelve uno vuelve cambiado, o no, eso está por ver.

Sin mucha meditación me uní al proyecto, pero yo era más ambicioso, y le conté a Héctor que quería recorrer la mitad de Sudamerica. Si nos lo montamos bien, lo mismo nos da tiempo a visitar Argentina, Chile, Bolivia y Perú, y si no, ya lo haremos cuando volvamos para visitar el resto... Se descojonó...

Fijándonos un límite temporal máximo de dos meses, nos pusimos en marcha. Primero a preguntar a los amigos que ya han estado por allí: Isa, Ángel, Carlos Ortega, Juan Ubaldo, José, Tinoco (a ver si le localizamos), y todo aquel que quiera aportar algo. Después paseo por las embajadas que nos ha servido para recoger una cantidad de información casi indigerible, y visita a las bibliotecas para ver qué tipo de guía de viaje nos gusta más (en la actualidad tenemos siete!).

Y uno piensa que ya está todo hecho pero a medida que pasan los días, te das cuenta de qué distinta es la verdad, porque tienes que equiparte y protegerte así que... hazte el pasaporte y el carné de alberguista internacional, ponte todas las vacunas del mundo, búscate una mochila, unas botas de montaña, un saco-sábana por aquello de la higiene, un frontal, un Mp3, un botiquín, un repelente contra insectos, unos candados para los locks, unos libros, un seguro médico... y quizá lo más importante, porque hasta ese momento no te das cuenta de que va en serio, compra el billete de avión!!! En nuestro caso sólo de ida, que no sabemos desde dónde nos tocará volver...

Espero que este blog vaya creciendo con cierta frecuencia, pero como no sé qué tal lo tendremos por allí, ni las ganas que nos quedarán, no sean boludos y no metan prisa.

;-p